Fué el contrabando una vía de escape para mitigar el hambre de muchas personas a un lado y otro de la frontera. Portugueses y españoles se jugaban la vida transportando desde café, alpargatas, hilo de coser, agujas, hoces y otros muchos elementos para ganarse algún real con el que poder mitigar la penuria diaria. Han llegado los granaínos a lugares tan dispares como Trigueros, Valverde, Niebla o Hinojos. Iremos colocando aquí las numerosas historias que los vecinos quieran compartir, historias muy comunes con el resto de personas de estos 1232 kilómetros de frontera o raya. La primera de las historias da para un cortometraje.
José fué un granaíno que llegó a formar parte de la quinta del biberón y que como muchos granaínos fueron llevados a la guerra, a él le tocó estar en el frente de Brunete, donde contaba que los muertos eran muchos, siendo herido en ella. Tras la guerra tuvo que realizar dos años de servicio militar. Volvió a su pueblo y realizó trabajos en el campo, tala, siembra y también fué varias veces al contrabando. Parte la cuadrilla de contrabandistas de los Picoitos, cruzan la ribera por Malpique y se dirigen a la tierra llana de Huelva, durmiendo al raso y en algunos pajares. En un pueblo de la tierra llana, de madrugada uno del pueblo dirige la cuadrilla hasta un doblado al que suben por una escalera. La cuadrilla duerme en el doblado, que tenía algo de paja en el suelo.A las diez de la mañana José que siempre fué temeroso, se sorprende al oir el sonido de una máquina de escribir, mueve la paja y por el hueco que deja las tablas en los doblados mira hacia abajo y ve el brillo de dos tricornios. El final de la historia lo daremos en otro momento.
María es una granaína que aún vive y que acompañó a su madre a la compra de mercaderías que vender en España y con las que mitigar el hambre. La madre es detenida y llevada a la cárcel de Mértola, los guardiñas para no dejar a la niña sola también la llevan a la cárcel. Ante la extrañeza de la tardanza de la niña y su madre, tendrá que ir su padre en busca de ellas, preguntando hasta dar con ellas en la cárcel.
Esperanza, Carmen y Francisca volvían con las mercancías a cuestas compradas en Portugal, llegan a la ribera que llevaba mas agua que a la ida y Francisca intenta pasar por un lugar al cual sus compañeras le dicen que no debe ir, resbala y cae al agua. La corriente la arrastra y Francisca muere ahogada en la ribera del Chanza.
Fué Carmen una granaína luchadora que mercadeaba entre Portugal y España con el agua muchas veces por encima de la cintura, acompañada de alguna de sus hijas, al llegar cerca de algunas aldeas como Alves, Picoitos o los Fernandes, alguna enamorada se acercaba y avisaba a Carmen o al grupo de españoles si debían esconderse o no. Venha luego, porque el namorado (guardiña) vendría pronto, traía Carmen peines españoles con los que la namorada se peinaría.
Carmen acompañada de su hija llegan a una casa portuguesa de la Corte Machado, llueve a cántaros, la dueña de la casa les abre y agasaja, secándose las ropas y dándoles de comer. El hijo de la dueña dormirá en el pajar y las españolas en la cama donde dormía el hijo. Todo un ejemplo de solidaridad internacional.
Jasinto fué un profesional del contrabando.Nacido en Portugal,aventurero, negociante y jugador empedernido. Cogía a un mulo en Portugal le quitaba el cabresto y cargado de contrabando el mulo hacía el camino que previamente Jasinto le había enseñado, así si Jasinto era apresado el mulo no lo sería, llegando este al destino al cual había acostumbrado
Manuel es un granaíno que como muchos otros acostumbra a tomar el fresco o a sentarse a la puerta y charlar con los vecinos. Agricultor y cazador, también hizo sus pinitos en el contrabando yendo desde los Alves hasta Niebla portando junto con 10 granaínos fardos de café de 35 kilos cada uno. Será en el castillo de Niebla donde los granaínos vendan el café
La ribera del Chanza es una ribera que al tener una cuenca relativamente grande puede subir de nivel en cualquier momento, en primavera podía ocurrir que las lluvias fuesen tan frecuentes que pasar la ribera se convirtiese en algo casi imposible. Así Manuel, un granaíno, estuvo mas de tres meses en Portugal.
Pasaba Carmen y sus compañeras la ribera por un lugar casi siempre fijo, cuando la ribera lo permitía.En el lado portugués un muchacho de 14 años "piropeaba" a las españolas en portugués. El piropeo ocurrió varias veces, hasta que en una de las ocasiones dan con el padre del chaval y le explican la situación. El padre le dió tal tunda que a partir de ahí las españolas pasaban sin que nadie osara piropearlas.
Es el contrabando una actividad de riesgo, de ahí que marinos y mineros sabedores de que en cualquier momento todo puede acabar se den a la bebida o a los amores. Alifonso se casó en Portugal, allí había nacido. Dedicado al contrabando, pasaba café y otros elementos. Como muchas veces la ribera u otras circunstancias impedían el paso, conoció a Joaquina en España, de forma que Alifonso paraba con Joaquina en la ida y con Rosinda en la vuelta.
Nació Antonio en un montiño del Algarve del concelho de Alcoutim y allí murió. Con hermanos en España, uno de ellos en El Granado. El y su cuadrilla cruzaban el Guadiana a nado con fardos de café.Todos los que lo conocieron lo definen como una persona valiente y arrojada ante los peligros de un río siempre acechante.Cruzar el Guadiana a nado tirando de una cuerda y de noche. Ni los cuerpos especiales de los ejércitos.
La casa de tío Isidoro se llenaba de españoles que dormían en su casa, en los pajares o donde pillaban. Hasta cuarenta hombres a veces tenían que esperar a que la ribera bajase para poder cruzarla. A veces el jaleo era tan grande, que tío Isidoro tenía que coger las de Villadiego y echar a algún alborotador a la calle, pues los guardiñas acechaban.
Isabel vuelve de Pomarao de comprar garbanzos y productos alimenticios en las tiendas que había en Pomarao.La del Pintor, en este caso.En el lado español le requisan la carga y para que sirviera de escarmiento riegan el camino de garbanzos.